sehnsucht
Sucedió en mi cama. Entre el ojo aeromántico y la babel tejida de letras y de sábanas. En medio del latido de opio, debajo del desastre de mis ánimos larvados.
Todo lo supo entonces el alma en su epilepsia, en el paroxismo cruento de su aislada y divina decadencia.
Todo lo supe y se me hicieron de seda las espinas, de sándalo el olor de mis labios oxidados -puentes rotos, enmohecidas ruinas- puertas selladas hasta la hora del intruso en mi búnker coronario.
Esa noche dulcemente violaron mi candado.