VIII
Y yo la inhalo escrita en el rojo de su estela.
Le palpo el ampuloso sueño. Le leo el astro dormido en la entrepierna.
Y ronronea.
Se confiesa al oído absolutorio de mi lengua.
Y yo la inhalo escrita en el rojo de su estela.
Le palpo el ampuloso sueño. Le leo el astro dormido en la entrepierna.
Y ronronea.
Se confiesa al oído absolutorio de mi lengua.